Rombos y triángulos, motivos en alza
Rombos y triángulos, motivos en alza
Las formas geométricas, con una combinación de colores acertada, son una herramienta de decoración muy potente. El efecto “print” ha ido evolucionando en los últimos años, y si la temporada pasada el motivo en tendencia era el hexágono, ahora van ganando puntos dos elementos complementarios: El rombo y el triángulo, a priori formas sencillas pero que bien ubicadas pueden imprimir mucho carácter.
Estos estampados encajan estupendamente en el dormitorio, no solamente en habitaciones juveniles o infantiles. La clave reside en superponer los rombos o los triángulos (a veces entremezclados en un mismo diseño) con otras formas geométricas como las rayas o el zig-zag, en composiciones dinámicas que se ven fortalecidas con colores vivos y enérgicos como amarillos, naranjas y verdes mentolados.
Si preferimos probar el resultado de forma puntual para no arrepentirnos, podemos plantearnos el uso de los rombos y triángulos sobre la pared, en formato de alfombra, vinilo adhesivo o papel de pared. Si no nos atrevemos a llenar una superficie completa (o nos parece demasiado trabajoso) una alternativa es optar por una forma geométrica irregular en un dibujo abstracto; al darle un aspecto asimétrico no se notarán los pequeños descuadres que nos puedan surgir por falta de práctica.
Estas figuras geométricas en plantillas repetitivas o interseccionadas funcionan muy bien como supuesto marco cromático que sirva de referencia para la zona a decorar; los tonos pastel agrandarán pequeños ambientes o habitaciones con poca iluminación, los más oscuros otorgarán sensación de armonía y confort, los diseños llamativos serán un punto de inflexión en espacios poco personales. Igual parece evidente decirlo, pero no es óbice para insistir en lo fundamental de saber escoger el juego adecuado de color, tamaño y orientación de los rombos y triángulos.
Los troncos y los triángulos también son recurrentes en estantes polivalentes, como motivo para tejidos retro o clásicas tapicerías de cuero en sillas y butacas, e incluso pequeños espejos para recibidores o rincones íntimos. Aunque en general los motivos geométricos incitan al orden, hay que admitir que estos polígonos en concreto adquieren un toque fresco, dinámico y animado si sabemos manejar “el juego de picas”
Fuente: bezzia.com